En la mesa redonda se ha estado hablando de la descarbonización en Europa:
Para Mattia Maritati, head of gas business development de Iveco: en un mundo ideal, tendríamos una solución única que funcionaría al 100%, pero la experiencia nos dice que esto no es así y que el camino será largo. Sin embargo, se están tomando medidas cortoplacistas que están generando dudas en los inversores a lo largo de toda la cadena de suministro. No se trata solo de conseguir que las alternativas estén en el mercado, necesita crearse el marco necesario para su implantación.
En mundo ideal, tendríamos una solución única que funcionaría al 100%
Sin embargo, Lars Martensson, environment and innovation director de Volvo ha señalado que está claro que se ha marcado una dirección, y ahora mismo mucha gente cree que solo hay una solución. Así, no nos estamos movimiento lo suficientemente rápido. Las distintas opciones no deben ponerse a pelear entre sí, porque nuestro rival no es la electricidad ni el hidrógeno, sino el diésel. Por otro lado, Anna Venturini, policy officer de EBA ha querido recalcar que creemos que hay varias soluciones disponibles y que todas son necesarias. Es una buena señal que la Unión Europea haya aprobado una política más neutral tecnológicamente hablando, y es positivo que se haya dado una definición que no mida las emisiones solo desde el tubo de escape, permitiendo que combustibles como el biometano puedan ser considerados renovables.
No se puede optar solo por una energía
La industria necesita un empujón, y la legislación tiene que marcar un ritmo ambicioso para que podamos cumplir los objetivos. Y esto no se va a hacer con una sola tecnología. El hidrógeno es una solución sólida y válida en todo tipo de movilidad, no solo por carretera sino también aérea por ejemplo. Ahora mismo, España, Francia y Noruega son los tres países más capacitados para producir hidrógeno», declaró Darko Levicar, transport policy director de Hydrogen Europe.
Para finalizar, Íñigo Tertsch, senior sales trader de STX Group matizó que «si lo que queremos es descarbonizar el transporte, no podemos optar por una sola energía. En España tenemos mucho potencial para producir energías renovables y una gran red, pero creo que tenemos una concepción equivocada, y que muchas veces no se toma en consideración todo el ciclo de vida del carburante a la hora de medir su eficiencia.
