En muchas ocasiones hemos recalcado nuestro apoyo a estas iniciativas, con la esperanza de que se extiendan más allá de los siete días actuales.
Sin embargo, todo este esfuerzo colectivo puede quedar en nada por culpa de comportamientos fuera de lugar. Y además, injustificados. Seguro que os han llegado las reacciones del entrenador y la estrella del equipo de fútbol galo PSG, cuando en rueda de prensa les preguntan por qué utilizan un jet privado para un desplazamiento de 200 km, existiendo alternativas mucho más ecológicas. Lo que hicieron, por si no lo habéis visto, es desternillarse de risa.
Responsabilidad
¿En serio? Seguro que este tipo de vanalidades quedan muy lejos de sus respectivos estatus de multimillonarios, pero en tiempos duros en lo económico, no hubiera estado de más haber ajustado un poco su respuesta a la corriente de respeto al medio ambiente y cuidado del entorno que se está imponiendo en la sociedad.
Ojalá este tipo de comportamientos no se repitan. Las personas que son famosas y referencia mundial tienen un importante papel que jugar en este tipo de objetivos comunes. Y no pueden obviar esta responsabilidad. Al menos queda esperanza, porque el rechazo a sus reacciones ha sido muy notorio.

