Sesé cumple un año de actividad en Estados Unidos. La compañía, especializada en el ensamblaje de ejes delanteros y traseros para la industria de automoción, abrió el año pasado en Chattanoooga (Tennessee) su octavo centro de producción a nivel mundial, en el cual puede realizar 1,3 millones de montajes al año que se traducen en 325.000 vehículos, afianzando así su posición en Norteamérica.
El centro supuso una inversión de 40 millones de euros, y cuenta con 28.000 metros cuadrados dedicados a la actividad industrial. En él trabajan más de 400 personas, y desde allí se coordina a más a 100 proveedores y se gestionan más de 360 componentes.
La planta más innovadora
Sin embargo, más allá de por su tamaño, estas instalaciones destacan por ser las más recientes y por tanto las más avanzadas en términos de innovación y eficiecia de Sesé. En sus cuatro líneas de producción, 16 robots automáticos colaborativos interactúan con 56 Automatic Guided Vehicles, y, en línea con los objetivos de la empresa, sigue un plan de reducción de impacto ambiental. Para ello, dispone de maquinaria de alta eficiencia, instalación de placas fotovoltaicas de autoconsumo, sistemas de recirculación de agua, y emplea materias primas recicladas y/o reciclables.
«Este proyecto ha permitido consolidar la posición de Sesé como socio estratégico para la industria de automoción, así como nuestra capacidad para desarrollar con éxito un proyecto integral y llevarlo a cabo de principio a fin: dede la localización del terreno, construcción íntegra de la planta, diseño de las líneas de producción, instalación de los equipos tecnológicos, integración de sistemas, puesta en marcha, arranque de pruebas y prototipos, hasta el primer suministro de la serie 0″ aseguró Araceli Carrasco, CEO de la compañía.
