Por eso, tiene mucho mérito lo conseguido en los seis pabellones de la Brussels Xpo que ocupa la feria, porque el día 7, el de apertura al gran público, todo estaba perfecto.
Pero, ¿y el día 6? La prensa internacional iniciaba su programa la víspera de la inauguración oficial, con ruedas de prensa programadas cada media hora desde las 9.00 de la mañana hasta media tarde. Una intensa agenda que funcionó casi a la perfección también, excepto una convocatoria que no se llevó a cabo por un malentendido y que, en breve, será explicada como se merece.
En construcción
Sin embargo, la crítica reside en ese día 6, dado que la parte de los stands y pabellones que tenían que acoger a la prensa estaba en orden. Algo que no podían decir el resto de espacios, en los que los operarios del recinto seguían tirando la moqueta por los pasillos, todos los puestos de restauración estaban cerrados y, en algunos stands, se seguía trabajando a marchas forzadas.
No es de recibo que falte tanto por hacer con las puertas abiertas. Y no es la primera vez que sucede (en Busworld y en muchos otros eventos del Sector, como la IAA, donde es imposible hacer fotos durante ese día). Ojalá que tomen nota en otras convocatorias y esta cuestión se vaya resolviendo paulatinamente en futuros encuentros.

