El presidente de la Asociación, Jordi Trius, explicó que por fin, tras dos años de imposibilidad por la pandemia, podemos celebrar el centenario de nuestra Asociación. Quiso resaltar que somos los representantes del brazo marítimo de un puerto porque atendemos a los buques y a las necesidades de sus tripulaciones y de su pasaje, además de coordinar los múltiples servicios que comporta una escala, que pueden llegar a ser hasta 150 tareas distintas. Añadió que, en muchos casos, somos quienes controlamos y damos servicio de continuidad logística a las mercancías cargadas y descargadas en los puertos, motivo por el cual somos una parte relevante de la cadena de transporte.
El trabajo de los consignatarios también es conseguir que el buque esté el menor tiempo posible en el puerto, porque generan valor cuando navegan y transportan mercancía y no cuando están atracados; por ello, una de nuestras principales misiones es que su paso por el puerto sea lo más eficiente y rápido posible.
En este sentido, Jordi Trius puso énfasis en que somos una profesión antigua, a pesar de no siempre estar bien reconocida o comprendida porque aún luchamos por una titulación y un registro oficial efectivo, como existe en otros países cercanos y en otras actividades del sector logístico.
En palabras del presidente de la Asociación, históricamente hemos demostrado una gran capacidad de resiliencia y flexibilidad; nuestro variado colectivo empresarial y asociativo es una buena muestra de ello. Y aunque algunas agencias estén especializadas, otras sean más generalistas, unas sean empresas independientes y otras estén integradas dentro de la estructura de un armador, todos ejercemos de consignatarios de buques en un puerto altamente diversificado como Barcelona que permite a todas estas empresas desarrollar su trabajo y añadir valor.
Historia y compromiso
Ricard Font, secretario general del Departamento de Vicepresidencia y de Políticas Digitales y Territorio de la Generalitat de Catalunya, tomó la palabra para hacer una paralelismo de lo que ocurre actualmente con lo que sucedía hace 100 años: Se estaba dejando atrás la pandemia de la gripe española, Europa salía de una guerra mundial y se sabía que empezaba una crisis económica importante. Pero, ya en aquella época, los consignatarios supisteis avanzaros en lo que supone el asociacionismo y en encontrar soluciones en momentos complicados. Cien años después, estamos saliendo de una pandemia y, por ello, es muy importante que compartamos que hemos sido capaces de hacerlo con solvencia y resistencia. Hoy podemos decir que hemos salvado gran parte de las empresas, de las familias y de los negocios.
Ricard Font también quiso resaltar que durante la pandemia hemos conseguido que las cadenas logísticas no parasen y esto lo hemos logrado entre todos, pero vosotros habéis sido los protagonistas de este esfuerzo colectivo. Añadió que ahora afrontamos una nueva crisis económica, pero si la afrontamos con la misma confianza, también la superaremos entre todos y gracias a todos.
La última intervención fue la de Damià Calvet, presidente del Port de Barcelona, que empezó destacando que el tráfico mundial de contenedores es la base de la economía y sin barcos, que requieren ser consignados en un puerto, no hay actividad marítima.
Los consignatarios de Barcelona celebráis más de 100 años de actividad, pero también tenéis una serie de carencias estructurales que, como presidente del Port de Barcelona, quiero resaltar. Por un lado, necesitáis que vuestra actividad tenga una titulación y una capacitación formal de la profesión y, por otro lado, necesitáis que se establezca un registro de consignatarios para que todo esté más ordenado. En estas reivindicaciones tendréis al Port de Barcelona a vuestro lado.

