El evento estuvo organizado a iniciativa de la asciación AGTC y apoyado por la Dirección General de Transportes y Movilidad de la Generalitat de Cataluña, y comenzó repasando el desafío que ha supuesto para las empresas la vigente legislatura. Esta, afectada por retos como pandemia o la crisis energética, ha sido complicada para las empresas, que deberán enfrentarse también a otras problemáticas como las relativas a la falta de conductores, digitalización, seguridad, medioambiente y capacidad de la infraestructura.
Se propusieron medidas para afrontar la escasez de conductores
En relación a la creciente escasez de conductores, UETR considera que el problema debe ser abordado aumentando el atractivo de la profesión, para lo cual es necesario tomar medidas como la implantación de una red de áreas de aparcamiento seguras o la prohibición de la participación de los conductores en la carga y descaga. Asimismo, se mostraron a favor de simplicar los procedimientos para contratar conductores de países ajenos a la Unión Europea y de cerrar la brecha de las disparidades sociales y fiscales en el continente para evitar la fragmentación.
En cuanto a digitalización, la asociación aspira a lograr la plena implementación de las tecnologías digitales en el Sector, apoyando el despliegue del eCMR y garantizando la neutralidad de los servicios de gestión y la protección de los datos comerciales. De esta forma, esperan que se genere un mercado competitivo en el que ningún proveedor domine la introducción de requisitos estándar de la UE. Esta digitalización puede ir de la mano de los avances en seguridad, pues en este sentido UETR planteó la integración de los sistemas de vigilancia avanzados en infraestructura clave y de medidas de ciberseguridad para los futuros vehículos autónomos.
Sostenibilidad y competitividad deben ir de la mano
La sostenibilidad será otro de los aspectos clave de la próxima legislatura, un apartado que la organización considera que debe afrontarse garantizando la combinación energética y la neutralidad tecnológica. Mediante el apoyo de todos los combustibles neutros en carbono y un mercado que los ofrezca a un precio justo, creen que se podrá lograr que la sostenibilidad y la competitividad vayan de la mano, permitiendo que las pequeñas empresas no se queden atrás frente a las más grandes.
Además, se planteó la necesidad de acelerar la provisión de puntos de recarga de energías alternativas, mejorando la capacidad de infraestructuras del continente.
