La evolución del hidrógeno y las pilas de combustible en los vehículos profesionales va en aumento, pero a distintas velocidades en función de las regiones del planeta.
El futuro del hidrógeno como alternativa de propulsión para todo tipo de vehículos se daba por seguro, aunque quizá su llegada a nivel masivo se esté ralentizando un poco más de lo esperado.