El tratamiento de los datos y la posible vía para que se compartan entre las Administraciones y los usuarios, con la necesaria seguridad, forman parte de su cometido. Una de las preguntas que se formulan, y para la que se busca respuesta, es: ¿Qué datos se necesitan, para qué fines y por qué partes interesadas?
La calidad y el coste adecuados de la generación de datos dependen del tipo de datos que deben estar disponibles y compartirse. La iniciativa MDMS debería aclarar el alcance de la puesta en común de datos; los actores que se requiere o se espera que compartan datos; así como los contextos y casos de uso aceptables.
En cuanto al alcance de la puesta en común de datos (¿qué datos se necesitan?), los participantes en un sondeo general se refirieron a los Reglamentos existentes, en particular el MMTIS y el Reglamento revisado sobre los derechos de los viajeros de ferrocarril, que ya contienen amplias listas de datos (estáticos y dinámicos) que deben compartirse en sus anexos. Además de los elementos que ya figuran en estas listas existentes, algunos participantes sugirieron que también podrían considerarse los siguientes datos que faltan y que aún no se han incluido: datos sobre ocupación (en tiempo real); datos relacionados con el uso de la bicicleta y la micromovilidad; información posterior al viaje; información sobre reservas y pagos / API; y más detalles sobre tarifas (incluidos servicios complementarios, recargos, tasas), condiciones para cambiar/cancelar billetes, etc.
La UITP comentó que sería útil disponer de un glosario común, ya que actualmente muchos términos se utilizan con un significado diferente en cada ámbito del transporte (ferroviario, por carretera, fluvial, aéreo, transporte público local).
Múltiples agentes implicados
En cuanto a los agentes implicados, el ecosistema de la movilidad es muy diverso: desde grandes operadores y proveedores de servicios hasta pequeñas pymes, abarcando una gran variedad de modos y contextos. Por ello, la iniciativa MDMS debe definir las funciones y responsabilidades de todas las partes interesadas activas, tanto públicas como privadas, de acuerdo con esas especificidades. ¿Cuáles son los puntos de acceso a los datos? ¿A quién deben facilitarse los datos? ¿Qué tipos de intercambio de datos abarca la iniciativa MDMS? ¿B2C, B2B y/o B2G? Además de los operadores, los gestores de infraestructuras y los proveedores de billetes (según lo previsto en el Reglamento RPR revisado), también debería considerarse el papel de las autoridades (PTA) (especialmente para la movilidad urbana). También se sugirió aclarar el papel de los SGD y cómo la revisión del Código de Conducta de los SIR se integrará en la nueva iniciativa de SGD.
Por último, varios miembros señalaron que toda obligación de generar y compartir datos (tanto estáticos como dinámicos e históricos) debería basarse en casos de uso concretos (¿para qué se utilizan los datos?) a fin de evitar cargas y costes innecesarios (véase también más adelante).

