Actualizar el capítulo de inversiones y estructurar el presupuesto por unidades de negocio: autobuses, aparcamientos, movilidad ciclista, movilidad vertical y consultoría, centran las razones de dicho cambio, que dejan la cifra muy cerca de los 62 millones de euros y prevén un beneficio neto cercano a los 800.000 euros.
Esto se traduce en un incremento con respecto al presupuesto para 2022 aprobado en octubre de 2021 de un 69,75%, sobre la base de la captación de fondos europeos para la inversión que repercutirán en la movilidad urbana de la ciudad. Porque una de las evidentes apuestas del consistorio pucelano, y bajo la gerencia de Álvaro Fernández, es el fomento del transporte público como medida alineada con el desarrollo de la Zona de Bajas Emisiones
Diferentes partidas
Valladolid contará, gracias a estas inversiones, con una flota más electrificada, un transporte más intermodal, un nuevo sistema público de bicicletas y una serie de aparcamientos seguros para este medio de transporte. Se prevé destinar 18,7 millones de euros en 30 autobuses de GNC y 11 autobuses eléctricos, 0,8 millones para adaptar la cochera a la carga eléctrica eficiente de autobuses, 1,7 millones para la construcción de un nuevo centro de control y 1,6 para la renovación de los sistemas embarcados de tecnología y el nuevo Sistema Inteligente de Explotación de Autobuses (i-SAE), mencionando solo las partidas relacionadas con el autobús urbano.
Un paso al frente que refrenda la estrategia que viene llevando a cabo la ciudad. Y que, a otro nivel, va dando sus frutos, porque allí será donde Switch construya su planta de buses y furgonetas eléctricas.

