El proyecto DRIVSCO ha sido desarrollado por seis países europeos, entre ellos España, representada por un grupo de investigadores del Departamento de Arquitectura y Tecnología de Computadores de la Universidad de Granada. A diferencia de otros proyectos similares, DRIVSCO va más allá de un sistema de visión por computador para ayuda a la conducción, señalan desde el centro universitario español.
El concepto que se ha investigado es cómo hacer que el coche aprenda el modo de conducción del usuario, distinguiendo entre modo diurno y nocturno, para a partir de esa muestra poder generar señales de alarma para alertar al chófer de su forma "inusual de acercarse a una curva", o de un objeto detectado de potencial peligro.
Los investigadores españoles han desarrollado un sistema de visión artificial (análisis de la escena) en un solo chip. Este dispositivo se podrá incluir en diversos tipos de vehículos en el futuro. El profesor Eduardo Ros Vidal, coordinador del equipo español, ha señalado que con este proyecto "no se pretende desarrollar sistemas que conduzcan automáticamente, sino dispositivos avanzados de ayuda a la conducción". El objetivo final de DRIVSCO "es evitar accidentes de tráfico y ayudar a mantener en alerta al conductor", añade, en declaraciones recogidas por el portal Consumer.es.