Así de rotundo se muestra Raghu Ramachandran, socio fundador de 13 Colony Global y miembro del Consejo Asesor de Ti, en un artículo en el que explica sus perspectivas para el año 2023. “El diccionario Oxford define ‘normal’ como típico, habitual u ordinario; lo que cabría esperar. ¿Es típico, habitual u ordinario? En todo caso, es muy difícil volver a un estado estable o ‘normal’ tras las extraordinarias sacudidas que han sufrido las cadenas de suministro en los últimos años. Nuestra eficiente red de comercio mundial se ha visto perturbada y seguirá siendo diferente de lo que los consumidores y las empresas consideraban ‘normal’. En consonancia con las tendencias de la globalización, lo que vemos cada pocas décadas es una transición hacia una nueva ‘normalidad’. De hecho, lo 'normal' tal y como lo conocíamos en 2019 ha dejado de existir. ¡Ya no existe! Espero que no sea 'normal' o que no volvamos al estado prepandémico, porque eso significaría que las vulnerabilidades en la cadena permanecen, y es probable que se rompan una vez más. Al inicio de otra alteración Creo que, gracias a la tecnología y la automatización, estamos en las fases iniciales de otra alteración o evolución de la cadena de suministro, y aún está por ver cuándo o cuál será la nueva "normalidad". Los proyectos de reestructuración de la cadena de suministro, iniciados cuando la pandemia dejó al descubierto cadenas endebles, pueden tardar años en alcanzar un estado estable. (…) Es aún más difícil esbozar lo que preveo para este año, dada la continua incertidumbre geopolítica y económica, pero cabe destacar que la inflación y la amenaza de una recesión sirven de trasfondo a la totalidad de estas predicciones. Además, hay que tener en cuenta que la tecnología es la base de los cambios en la cadena de suministro. Cambios en los patrones comerciales Con la dependencia del aprovisionamiento limitado que se ha puesto de manifiesto durante la pandemia y las actuales tensiones geopolíticas, es de esperar que se produzca un reajuste importante de la cadena de suministro. México (como se puso de relieve en la reciente reunión de EE.UU., CA y MX) seguirá atrayendo más inversiones de sus socios norteamericanos y probablemente atraerá a industrias de todo el mundo, además de la automotriz y manufacturera. El aprovisionamiento de productos del sur y sureste de Asia, junto con México, como parte de una estrategia China+n aumentará sustancialmente Impacto de la inflación y/o recesión Aumentará el coste de los préstamos para adquirir existencias. Con más certidumbre, será más fácil planificar con antelación. El mayor gasto en mano de obra y mercancías son otros factores que aumentarán los costes de almacenamiento y manipulación de existencias. La racionalización del almacén y de la mano de obra, que comenzó a finales del año pasado, se estabilizará en el 2º trimestre. (mañana completaremos el artículo de Raghu Ramachandran)