¿Por qué no existe una actuación más decidida del Gobierno contra los abusos de poder en el mercado de transportes?
La mejora de la mayoría de los indicadores macroeconómicos no es, en absoluto, concordante con la situación y la economía real de las empresas de transporte. Los costes de explotación no dejan de crecer, mientras que los precios de los servicios de transporte continúan a la baja, disminuyendo aún más la escasa rentabilidad y abocando a las empresas de transporte a una senda cada vez más peligrosa.
Además, las presiones de los clientes en el mercado deterioran cada vez más la actividad, se sufre una competencia desleal jamás vista hasta ahora, la sombra de las 44 toneladas planea sobre las cabezas, impulsada por las continuas presiones de las organizaciones de cargadores sobre el Gobierno, se lleva tiempo asistiendo a la implantación encubierta de la Euroviñeta en varias Comunidades Autónomas y todo parece indicar que la fiscalidad del gasóleo se igualará, en breve, a la de la gasolina.