Los sectores de Carreteras, Urbanos y Logística de UGT y CCOO han anunciado una nueva movilización que tendrá lugar el próximo 7 de junio frente al Ministerio de Transportes, reivindicando la jubilación anticipada para los conductores profesionales de transporte de mercancías y viajeros por carretera.
Bajo el lema del “día de lucha por la jubilación anticipada de las conductoras y conductores profesionales”, esta convocatoria repite la fórmula del año anterior, en la que los sindicatos hicieron pública su intención de visibilizar las duras condiciones laborales de estos trabajadores. Además, UGT y CCOO advierten que están dispuestos a plantear un paro general en el sector si no se avanza en esta reivindicación.
La edad media elevada de los conductores profesionales sigue siendo una de las principales preocupaciones. Según los sindicatos, conducir un vehículo de gran tamaño más de ocho horas al día, sometido a estrés, condiciones climáticas adversas y largos horarios laborales, no es seguro para los conductores ni para otros usuarios de las vías públicas. Esto es especialmente grave teniendo en cuenta que muchos trabajadores del sector tienen entre 65 y 67 años, edad en la que las capacidades físicas y cognitivas comienzan a disminuir.
Por otro lado, los sindicatos advierten de la falta de relevo generacional en el sector. Según explican, sin unas condiciones laborales más dignas, entre las que destacan la posibilidad de jubilarse de forma anticipada, será muy difícil atraer a jóvenes trabajadores a una profesión que consideran en riesgo de extinción.
La movilización llega en un momento en el que el Ministerio de Seguridad Social, dirigido por Elma Saiz, ha planteado un proyecto para reconocer la jubilación anticipada de autónomos que realizan actividades especialmente penosas o peligrosas, como podría ser el caso del transporte por carretera.
El nuevo real decreto buscaría regular las condiciones para que estos trabajadores puedan retirarse antes sin perder el derecho a cobrar el 100% de su pensión, una medida que tanto UGT como CCOO esperan que incluya a los conductores profesionales en su ámbito de aplicación.
Los sindicatos han insistido en la necesidad de participar en esta regulación, especialmente en lo que respecta a la aplicación de coeficientes reductores por penosidad, peligrosidad o toxicidad, como forma de justicia social y respeto hacia una profesión que consideran fundamental para la sociedad.