"La responsabilidad que tienen los políticos es enorme", ha declarado el secretario general de Acea, Ivan Hodac, horas antes de que comience en Italia la Cumbre del G8. "Las propuestas actuales conceden una ventaja competitiva a las industrias coreanas y sientan un peligroso precedente para futuros acuerdos de libre comercio entre la UE y otros socios comerciales, tanto que afectaría a las industrias de la UE más allá de las del sector, poniendo en serio riesgo la base productiva de Europa". Para Hodac, "esto es inaceptable, más aún en un momento en que todos los esfuerzos se dirigen a paliar la crisis económica. No hay ninguna razón para abrir el mercado europeo de más de 500 millones de personas a los términos coreanos. Primero, porque los fabricantes coreanos permitirían una importante cantidad de componentes de países cercanos. Segundo, porque pueden reclamar los impuestos que paguen por estos componentes, tan pronto como el producto final (que también está libre de impuestos) esté de camino de Europa".