En 2023, las proyecciones provisionales de Ti indican que el mercado de la logística de contratos crecerá a un ritmo más lento que en 2022, ya que la economía entra en una pronunciada desaceleración, ya observada en la segunda mitad de 2022 y que se extenderá en 2023.
Así, se prevé que el mercado crezca un 3,1% interanual alcanzando un valor de 253.706,3 millones de euros. La ralentización será más pronunciada en Europa (0,6%) y América del Norte (2%), que registrarán un crecimiento mucho más débil que la media mundial.
El mercado estará impulsado por la región de Asia-Pacífico (5,7% interanual), donde se espera un fuerte crecimiento del PIB, la industria manufacturera y el comercio minorista. Como describe el FMI en su actualización de octubre de 2022, «Asia sigue siendo un punto (relativamente) brillante en una economía mundial cada vez más aletargada».
Al comentar las perspectivas para 2023, varios de los principales proveedores mundiales de logística de contratos han señalado que, aunque los factores macroeconómicos ralentizarán el crecimiento, es improbable que afecten negativamente al mercado en la misma medida que en el sector de los contenedores, por ejemplo, que es más vulnerable a los ciclos de auge y caída.
¿Cómo afectará la economía?
Así, en su última presentación de resultados, el consejero delegado de Ryder, Robert Sánchez, comentó que «por lo que respecta a la cadena de suministro, se trata de problemas contractuales. En cuanto a la cadena de suministro, se trata de negocios contractuales en los que tenemos contratos a largo plazo con nuestros clientes. Por tanto, incluso cuando hay cierta volatilidad en el mercado, los márgenes se mantienen muy bien… si se observa históricamente».
Del mismo modo, Malcolm Wilson, consejero delegado de GXO, subrayó que, aunque es probable que las ventas se ralenticen a la par que la economía, la empresa espera que los beneficios se mantengan estables debido al carácter a largo plazo de los contratos. GXO también subrayó que uno de los retos más importantes a los que probablemente se enfrente el año que viene es el de las divisas. Por ello, la empresa espera ver un nivel de crecimiento más moderado a lo largo de 2023.
La continua acumulación de pedidos en la producción de automóviles impulsará, a su vez, los volúmenes en el próximo año. Tras la normalización del sector B2C después del cierre, también se espera que los volúmenes de comercio electrónico crezcan a partir de un nivel de base más alto en comparación con pre-Covid, concluye el estudio.

