Podemos poner el ejemplo de los límites para tributar por módulos, que algún año se han fijado el 28 de diciembre para el año que viene, y que no fueron una inocentada, pero lo parecieron. A pesar de que este año ha sido la excepción.
Algo similar puede suceder con el descuento de 20 céntimos por litro que actualmente se aplica a cada repostaje de combustible. Esta ayuda dejará de aplicarse con el final de año, aunque son muchos los rumores que circulan sobre una posible prórroga. Eso sí, con condiciones.
Hasta hoy, se reduce en 20 céntimos cada litro repostado a todos los usuarios, algo que podría cambiar en caso de que la ayuda se siga aplicando en 2023. La propuesta que parece estar sobre la mesa apunta a que ya no aplicará a todo el mundo, sino a una serie de segmentos de actividad determinados.
Sin noticias a menos de un mes
La cuestión es que, a menos de un mes, no se sabe ni cuándo, ni cuánto ni a quiénes. Es de suponer, y todo parece así indicarlo, que el transporte profesional no se verá afectado por un presunto recorte. Pero no todas las profesiones llevadas a cabo por autónomos pueden decir lo mismo, y el público en general tiene todas las papeletas para ser excluido de la mencionada prórroga.
Sea como fuere, lo necesario en estos casos es que cada uno, a su nivel y en función de sus necesidades, pueda planificar los meses venideros con la mayor antelación. Y eso es imposible si no hay una Administración que marque directrices, claras y precisas, con el tiempo suficiente. Quizá sea ya tarde, pero convendría que la decisión no se haga esperar más.
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