Explican desde el organismo que el año 2022, último del que se tienen datos contrastados, el número medio de tractoras por cada 1.000 habitantes en la UE era de 4,8, un aumento del 45,2% de 2012 a 2022 (de 3,3 a 4,8).
La media en España se situaba en 2022 por encima de las cinco unidades
En este sentido, los países bálticos y algunos miembros centrales y orientales de la UE fueron los de mayor auge en 2022, ya que los índices más altos se dieron en Lituania (una media de 17,3 tractoras de carretera por cada 1.000 habitantes), Polonia (12,9), Estonia (9,5), Hungría (9,3) y Rumanía (8,8).
En el extremo opuesto del cuadro adjunto se sitúan Chequia (0,3), Suecia (0,9), Austria y Malta (2,2), Chipre y Grecia (2,3), aunque en el caso de los territorios insulares es más fácil entender las bajas tasas de motorización.
Subidas y bajadas
De 2012 a 2022, aparecen tres países que duplicaron con creces su tasa de motorización de tractores de carretera: Rumanía (+127,4%), Croacia (+121,5%) y, con una tasa comparativamente alta ya en 2012, Lituania (+101,8%), mientras que también son reseñables los comportamientos en Polonia (91,2%) y Eslovenia (82,9%).
Sin embargo, Chequia registró un notable descenso de la tasa de motorización de los tractores de carretera entre 2012 y 2022 (-61,9%), hasta quedarse en los mencionados 0,3 vehículos, mientras que Luxemburgo (-15,4%) y Malta (-13%) fueron los países que menos descendieron entre los que presentan signo negativo.

