En el caso de las baterías, este asunto adquiere especial relevancia, porque la proliferación de vehículos eléctricos de todo tipo conlleva, como es lógico, una evolución similar de las baterías que emplean, para las cuales se debe de cerrar el mencionado círculo al final de su vida útil.
Sin embargo, la solución (o una de las múltiples que existen hoy) está en proceso. Así, Endesa y Sertego (una compañía del Grupo Urbaser), acaban de inaugurar en Ponferrada (León) la empresa Novolitio. Su nombre ya nos da una pista de a qué se va a dedicar: construir y desarrollar la primera planta de reciclaje de baterías de vehículo eléctrico de la Península Ibérica.
Inversión y proyección
14 millones tendrán la culpa de que la planta (cuyas obras comenzarán en la segunda mitad del año que viene) se convierta en realidad y que contribuya al impulso industrial del Bierzo, pues ubicará sus 15.000 metros cuadrados de superficie en el Polígono Industrial El Bayo. Será un ejemplo tecnológico, incorporando las últimas herramientas para la extracción, diagnóstico, descarga y reciclaje de los componentes de las baterías, en un 90% del total. Además, será capaz de determinar aquellas baterías que todavía tienen una segunda vida.
Sin duda, una muy buena noticia no solo para la región berciana, sino para todo el tejido industrial de sus alrededores y, en último término, para el medio ambiente.


