Entre tanto, Ti Insight y la Foundation for Future Supply Chain elaboraron un estudio sobre la diversidad de género en el ámbito del Sector de la logística y la cadena de suministro, que incluye una encuesta para tratar de identificar posibles barreras para que las mujeres progresen hacia puestos de dirección.
Los encuestados, más de un centenar, debían responder si creían en la existencia de obstáculos para el progreso de las mujeres en el Sector y, en caso afirmativo, cuáles eran. Más de la mitad de la muestra considera que, en efecto, existen obstáculos para que las mujeres ocupen puestos directivos, frente al 39% que no está de acuerdo. Estos fueron los principales mencionados:
Contratación profesional
Entre los que consideran que existen obstáculos, dos factores destacan en la fase de contratación: los «prejuicios inconscientes» y la «falta de representación/modelos de conducta». Muy pocos creen en una discriminación manifiesta, lo que no es de extrañar si se tiene en cuenta la legislación existente para evitar este tipo de prácticas.
Más sorprendente fue la relativa poca importancia de la «falta de asesoramiento profesional» a la que el sector suele achacar la dificultad para atraer a suficientes talentos.
Retención
Una vez contratadas, parece que existen múltiples razones que dificultan que las mujeres permanezcan en sus empresas. El prejuicio inconsciente reaparece entre los tres primeros motivos, pero la falta de flexibilidad laboral también es la causa que se menciona con más frecuencia, seguida de la falta de asesoramiento profesional. Parece que, una vez contratadas, las empresas tienen que hacer un mejor trabajo a la hora de aprovechar las oportunidades que pueden existir en la empresa y en el sector en su conjunto.

La percepción de una diferencia salarial entre hombres y mujeres sólo ocupa el quinto lugar en la lista de obstáculos que afectan a la retención.
Progresión
En términos de progresión profesional, los encuestados destacaron la falta de representación y de modelos a seguir a nivel directivo. También se identificó una falta de «espacio para crecer», lo que quizás indica que las funciones del puesto son demasiado inflexibles y no se amplían a medida que crece la capacidad del empleado. Entre los tres primeros también se encuentra el «sesgo inconsciente».


