Las principales bases de estas propuestas son el incremento de la conectividad y el traslado de más pasajeros y mercancías al ferrocarril y a las vías navegables interiores, el apoyo a la implantación de puntos de recarga, infraestructuras de repostaje alternativas y nuevas tecnologías digitales, la mayor atención a la movilidad urbana sostenible y la simplificación de la elección de diferentes opciones de transporte en un sistema de transporte multimodal eficiente. Si todo esto se lleva a buen puerto, el Sector podría reducir sus emisiones en un 90%, según las previsiones de la Comisión.
¿Posible solución?
Si hablamos de movilidad urbana, encontramos algunos problemas relacionados con la congestión, las emisiones y el ruido, que podrían ir solventándose con la ayuda del transporte público, los desplazamientos a pie y la bicicleta. Precisamente en este último punto, la Comisión ha publicado un vídeo para promover el uso de la bicicleta en los repartos de última milla. ¿Sería realmente una solución a considerar?

