En cuanto a las medidas de gestión que implican intervenir en la oferta de transporte, se ha valorado negativamente la reducción de personal y de gasto
Con respecto a los efectos de la pandemia, el informe reconoce que aún no se sabe en qué medida la demanda de transporte público puede verse afectada por la esperable evolución de la economía, la consolidación del teletrabajo u otros factores como el rechazo al transporte público. Así, advierte que, pese a que la movilidad en general se va recuperando considerablemente, todavía no se han alcanzado los niveles anteriores a la pandemia, contando, entre otras razones, con la pronunciada disminución del turismo (tanto vacacional como de negocios). En cuanto a los problemas ocasionados por la pandemia, el estudio confirma que las ciudades actuales no estaban preparadas para afrontar los efectos de una situación parecida. Del mismo modo, que los problemas en el transporte público (falta de higiene/limpieza, de personal, de conductores o de mantenimiento) perjudican la desescalada.
El informe de la AET propone una serie de medidas para favorecer e impulsar la recuperación de la movilidad en transporte público en las ciudades españolas. Entre ellas destacan, proporcionar más información a los usuarios y promover más servicios de transporte a demanda. Del mismo modo, los encuestados han valorado muy positivamente la implantación de medidas de mayor higiene y limpieza y separación entre personas. En cuanto a las medidas de gestión que implican intervenir en la oferta de transporte, se ha valorado negativamente la reducción de personal y de gasto. En definitiva, el estudio considera que lo más efectivo es impulsar la información a los usuarios, facilitar la distancia y aumentar las medidas de higiene. Asimismo, considera la utilidad de incrementar las opciones de teletrabajo.
