El proyecto comenzará en el primer trimestre de 2023 y tiene como objetivo probar mezclas de hasta un 10 % de hidrógeno verde. La planta de producción combinada de calor y electricidad que proporciona energía al Campus de Sonae y a la red nacional funciona actualmente con un motor Wärtsilä 34SG que funciona con gas natural. Este será uno de los primeros casos en los que el hidrógeno verde se utiliza para reducir la huella de carbono de una central eléctrica de Wärtsilä que funciona con gas.
El motor Wärtsilä de la planta ya es capaz de funcionar con gas con hasta un 3% de hidrógeno. Para alcanzar el nivel de mezcla del 10% previsto para satisfacer las necesidades específicas de Capwatt, se realizarán modificaciones en el motor, así como en su sistema de control y en el sistema de automatización de la planta. Capwatt pretende producir hidrógeno verde mediante un electrolizador, alimentado por energía renovable.
Descarbonización
«Estamos comprometidos con la descarbonización de nuestras operaciones y consideramos que la mezcla de hidrógeno y gas natural para alimentar esta planta es un paso importante para lograr este objetivo. Wärtsilä es una empresa con gran experiencia y conocimientos en este campo, y esperamos trabajar estrechamente con ellos en este proyecto pionero», comentó Sérgio Rocha, director general de Capwatt.
«Este proyecto muestra concretamente cómo las centrales eléctricas existentes pueden dar pasos hacia la generación de energía neutra en carbono«, dijo Sushil Purohit, presidente de Wärtsilä Energy y EVP de Wärtsilä Corporation. «Como tecnología, el motor de combustión representa una solución viable para permitir la transformación hacia la utilización de combustibles del futuro. La flexibilidad de los motores Wärtsilä ya desempeña un papel importante al permitir la incorporación de una parte mucho mayor de energía renovable en los sistemas eléctricos».
El proyecto está en consonancia con la Estrategia Nacional del Hidrógeno del país portugués, cuyo objetivo es aumentar la cuota de hidrógeno en el consumo de energía en un 5% para 2030 en el sector industrial. Durante la próxima década, el objetivo es contar con entre 2,0 y 2,5 GW de capacidad instalada de producción de hidrógeno, y tener entre un 10 y un 15% de hidrógeno inyectado en la red de gas natural.
Los motores de Wärtsilä pueden funcionar con mezclas de hidrógeno y gas natural de hasta un 25% de hidrógeno, y la empresa está trabajando para conseguir un concepto de motor y central eléctrica que funcione con hidrógeno puro en 2025.

