El hidrógeno ‘azul’ suele calificarse de «limpio» porque se produce con tecnología de captura, utilización y almacenamiento de carbono (CCUS). Actualmente tiene un coste superior sobre el hidrógeno producido por electrólisis (2,27 dólares/kg para el hidrógeno producido con tecnología CCUS frente a los 5,96 dólares/kg del hidrógeno producido con electrólisis renovable), pero también requiere menos inversión, ya que puede utilizarse la infraestructura de gas natural existente.
El hidrógeno con CCUS avanza rápidamente en algunos países, como Estados Unidos. Alrededor de nueve Estados del Medio Oeste, el Suroeste y la Costa del Golfo compiten por financiación federal para desarrollar sus economías de hidrógeno CCUS.
Recientemente, la empresa estadounidense de petróleo y gas ExxonMobil presentó su nueva planta de producción de hidrógeno, que utilizará la tecnología CCUS en sus instalaciones petroquímicas y de refinado de Baytown (Texas). La planta producirá hasta 1.000 millones de pies cúbicos de hidrógeno al día.
La infraestructura CCUS tendría capacidad para transportar y almacenar hasta 10 millones de toneladas métricas (MMt) al año. Otro ejemplo es el de Air Liquide, Chevron Corporation, LyondellBasell y Uniper SE, que forman un consorcio para producir hidrógeno utilizando gas natural con CAC e hidrógeno renovable por electrólisis en la costa estadounidense del Golfo de México para abastecer a los mercados finales.
Posiciones enfrentadas
Sin embargo, existe cierto debate en torno a la eficiencia de la tecnología:
– Las investigaciones sugieren actualmente que entre el 10 y el 20% del carbono generado durante la producción de hidrógeno no puede capturarse; sin embargo, se están desarrollando tecnologías que podrían capturar más del 95% del carbono.
– También existe un riesgo adicional de fuga de metano (el gas de efecto invernadero o GEI) durante la producción de hidrógeno; aunque en la encuesta que da pie a este informe de Capgemini, el 61% de los usuarios finales y el 51% de las organizaciones E&U creen que ni siquiera el hidrógeno producido con CCUS es sostenible desde el punto de vista medioambiental.
– Por último, como el precio del hidrógeno producido con CCUS está fuertemente condicionado por el precio del gas natural, que la actual crisis geopolítica ha elevado, su competitividad puede disminuir drásticamente en un futuro próximo, especialmente en Europa; más de la mitad de las organizaciones de usuarios finales (53%) y el 44% de las organizaciones de E&U así lo creen.

El gráfico adjunto muestra que la mayoría de las organizaciones (el 62% de las organizaciones de usuarios finales y el 59% de las organizaciones de Europa y Oriente Medio) creen que el hidrógeno producido con tecnología CCUS es sólo una etapa en el cambio a largo plazo hacia un hidrógeno bajo en carbono. Menos de un tercio (28% de E&U y 30% de usuarios finales) consideran, por el contrario, que la tecnología CCUS ha llegado para quedarse.

