¿De qué estamos hablando? El Instituto Tecnológico AIDIMME nos echa una mano. En concreto, sus especialistas en química inorgánica, que han desarrollado una metodología de extracción de los metales que componen las baterías de ion litio de los vehículos eléctricos, consiguiendo extraer hasta el 99% de los mismos mediante este impronunciable proceso de las láminas catódicas con un tratamiento previo de ultrasonidos.
Tratando de explicar este asunto, afirman que los ultrasonidos intervienen directamente en la extracción del 99% del aluminio y facilitan el trabajo posterior de electrolixiviación para el resto de los metales, obteniendo rendimientos del 99% para el níquel, litio y cobalto, y en menor medida para el manganeso, que alcanza el 42,2%. Cifras todas ellas más que relevantes.
De esta forma, la metodología propone un pretatamiento con ultrasonidos a temperatura ambiente que proporciona una lámina de aluminio limpia e intacta, y una electrolixiviación posterior efectiva mediante un proceso electroquímico en celda única y configuración catódica en medio sulfúrico a baja concentración.
Ventajas
Este método evita, por un lado, los actuales tratamientos de recuperación por incineración, los pirometalúrgicos (de gran consumo energético y contaminantes al emitir a la atmósfera compuestos como sulfuros o carburos), y por otro, los hidrometalúrgicos, menos agresivos, pero que utilizan gran volumen de reactivos (soluciones ácidas, reductores, y solventes) con largos procesos de lixiviación, de difícil reutilización, y de costes elevados.
Los buenos resultados han quedado de manifiesto gracias a la iniciativa Recibat, apoyada por el Instituto Valenciano de Competitividad Empresarial (IVACE), cuyo trabajo consiste en una reducción muy significativa de la concentración del medio ácido de lixiviación y sin necesidad de reductores en la electrólisis, que implica un menor consumo de reactivos y la disminución de las corrientes residuales.
Los buenos resultados animan a los expertos a continuar investigando esta vía de reciclaje de baterías de litio. El siguiente paso es el escalado en planta piloto del proceso desarrollado, así como la obtención de materias primas a partir de los metales extraídos, tales como el carbonato de litio o catalizadores de níquel y cobalto. ¡Suerte!

