La votación plenaria del Parlamento Europeo sobre las normas de emisiones de CO₂ para los vehículos pesados nuevos no reconoce otras soluciones que pueden desempeñar un papel en la descarbonización del sector del transporte comercial por carretera, a pesar de un impulso de última hora para lograr la neutralidad tecnológica.
Tras las discusiones y la aprobación previa del acuerdo por parte de la Comisión de Medio Ambiente, Salud Pública y Seguridad Alimentaria del Parlamento Europeo en febrero, el Parlamento Europeo ha dado su visto bueno definitivo al acuerdo provisional alcanzado por el Consejo, la Comisión Europea y el Parlamento Europeo en enero sobre las normas de CO₂ para los vehículos pesados nuevos.
No se adoptaron las enmiendas propuestas para introducir la definición de combustibles neutros en carbono y establecer una metodología para el registro de vehículos propulsados exclusivamente por dichos combustibles, a pesar de que la legislación supone un paso importante hacia la reducción de las emisiones de CO₂ de los vehículos pesados. Estas modificaciones tenían como objetivo considerar los vehículos que funcionan con combustibles neutros en carbono, lo cual es crucial para avanzar en la descarbonización del transporte por carretera.
Solución efectiva para la descarbonización
«Es decepcionante», expresó Raluca Marian, directora de Incidencia de IRU en la UE, al referirse al texto final que no reconoce la neutralidad tecnológica y la variedad de combustibles alternativos. Según ella, estos podrían ser una solución efectiva para lograr la descarbonización del sector del transporte por carretera. Además, señaló que la industria de la movilidad y la logística en la UE necesita contar con diversas opciones tecnológicas que se ajusten a sus diferentes requerimientos operativos.
La declaración realizada por la Comisión Europea antes de la votación es acogida con satisfacción por la IRU. La Comisión se comprometió a establecer una metodología para el registro de los vehículos que funcionan exclusivamente con combustibles neutros en CO₂, lo cual se espera que sea presentado un año después de la entrada en vigor del reglamento.
La inclusión de una cláusula de revisión más temprana y exhaustiva es otra novedad positiva. Esta cláusula es vital para ajustar la legislación en el futuro y garantizar que pueda evolucionar para apoyar mejor la transición del sector del transporte por carretera hacia la neutralidad en carbono.
«El sector del transporte comercial por carretera aún presenta un acuerdo mixto en general. La importancia de la cláusula de revisión más temprana y completa se demostró en la votación de ayer. Sin embargo, los legisladores deben concentrarse ahora en aprobar los incentivos necesarios para fomentar la adopción del mercado, especialmente en lo que respecta a pesos y dimensiones», concluyó Raluca Marian.
Antes de la publicación oficial de la ley, se debe llevar a cabo la aprobación formal por parte del Consejo como siguiente paso en el proceso legislativo. Manteniendo su compromiso, IRU apoya un enfoque más inclusivo de los estándares de emisiones que reconoce todas las tecnologías disponibles para descarbonizar los vehículos pesados.
