Y es que Cottrell cree que, aunque los objetivos son ambiciosos, faltan acciones tangibles para alcanzarlos, ante lo que destaca áreas clave donde cree que los gobiernos podrían marcar una diferencia significativa en el apoyo al mercado de camiones eléctricos.
Considera que en muchos países las subvenciones son insuficientes
La primera son las subvenciones para camiones enchufables, asegurando que las actuales no sirven como verdadero incentivo. Sí elogia la decisión de determinados países en los que la cuantía de la subvención se calcula en función de un porcentaje de la diferencia de precio entre vehículos de emisión cero y vehículos tradicionales, invitando a todos a optar por esta vía.
A su vez, destaca los desafíos financieros a los que se enfrentan las startups como Tevva de vehículos eléctricos en la adquisición de piezas y servicios para construir productos. Sugiere pues que las administraciones cierren esta brecha proporcionando préstamos de capital de trabajo para ayudar a iniciar negocios y evitar que el crecimiento se estanque.
Por último, Cottrell enfatiza la importancia de una infraestructura de carga rápida, confiable y estratégicamente ubicada para la adopción generalizada de camiones eléctricos. Critica el lento progreso en esta área y pide una acción urgente para garantizar una red coherente de cargadores para los operadores.
En conclusión, Cottrell afirma que la renuncia del gobierno a apoyar y estimular la transición a camiones de cero emisiones no es solo una oportunidad perdida sino una negligencia del deber. Insta a tomar medidas audaces e inmediatas a través de una estrategia integral que aborde las necesidades urgentes de la industria de camiones eléctricos, citando la urgencia de combatir el cambio climático.

