Una de las cuestiones importantes es ofrecer alternativas de movilidad a los interesados, por ejemplo con una sólida red de transporte público y opciones de movilidad compartida asequibles, puesto que repercute en la aceptación de las UVAR. Asimismo, es clave comunicar a los ciudadanos y a las partes interesadas que las UVAR no son sólo para generar ingresos, a fin de evitar la resistencia y prevenir la aparición de falsas narrativas.
Por ejemplo, la LEZ de Jerusalén afecta sobre todo a las pequeñas empresas, por lo que la ciudad puso una medida complementaria introduciendo subvenciones para los filtros de calidad del aire. Esto ayudó a comunicar claramente a los ciudadanos que el plan no tiene por objeto generar ingresos, sino reducir las emisiones.
Cuando el marco legal lo permite, destinar los ingresos de la UVAR a financiar medidas de movilidad urbana sostenible puede conducir a una mayor aceptación, ya que dicha por las partes interesadas también depende de que se concedan las exenciones adecuadas. Por ejemplo, un cupo de entradas gratuitas anuales (por ejemplo, ocho al año) puede permitir circunstancias excepcionales cuando el uso de un coche es necesario, por ejemplo para las visitas urgentes al hospital, sin poner en peligro los objetivos de la UVAR.
Actualmente hay un caso legal contra la LEZ en Barcelona. Los demandantes afirman que la justificación de la ciudad para aplicar dicha LEZ no es suficiente. Dado que la LEZ carece de un estudio económico, cuestionan la necesidad de un plan de tal envergadura. También la falta de alternativas se ha señalado como una limitación. Esto ilustra una vez más la importancia de anticipar y gestionar el impacto en las partes interesadas para que las UVAR tengan éxito.
Principales conclusiones
– Las ciudades no tienen más remedio que introducir restricciones como la LEZ o la tasa de congestión para respetar sus obligaciones legales de cumplir los valores límite de calidad del aire
– Una organización adecuada y un presupuesto específico son esenciales para proporcionar información clara y adecuada a las partes interesadas
– Es fundamental comunicar a los ciudadanos y a las partes interesadas que las UVAR no son sólo para recaudar, a fin de evitar la resistencia y que surjan falsos discursos.

