Hace apenas unos días que hemos conocido un nuevo producto que se incorpora a su portfolio, en este caso para el mercado japonés. Se trata del J7, un autobús de tamaño medio y, por supuesto, de propulsión eléctrica, que abrirá sus pedidos con el nuevo año y que espera formalizar las primeras entregas bien entrado 2025.
Con una capacidad máxima de 61 plazas, el vehículo cuenta con la batería Blade de fabricación propia, la joya de la corona y el signo de distinción del fabricante chino, que permite extender el rango hasta 250 kilómetros con una sola carga. En el interior, los usuarios encontrarán un piso plano continuo y una sensación de amplitud.
Un poco de historia
No es el primer producto que BYD lanza en el mercado nipón. De hecho, ya en 2015 vendió cinco autobuses eléctricos K9 en Kioto, a los que se han ido sumando el J6 y el K8, un autobús eléctrico de 10,5 metros, todos ellos compatibles con el estándar de carga japonés CHAdeMO.
El propio fabricante afirma que su cuota en el mercado japonés de autobuses eléctricos supera el 70%, fijando el objetivo en alcanzar unas ventas acumuladas de 4.000 autobuses en el país para 2030.

