Los operadores deberán tramitar un permiso diario y reservar espacio en entornos de alta afluencia a partir del 26 de enero de 2026
La ciudad de Barcelona ha activado hoy la plataforma zonabus.cat, que permitirá a los operadores de transporte discrecional realizar los trámites necesarios para el estacionamiento y las paradas de autocares turísticos. Estos trámites serán obligatorios a partir del 26 de enero de 2026, fecha en la que entrará en vigor el sistema Zona Bus 4.0, una nueva herramienta de gestión diseñada por el Ayuntamiento para redistribuir el flujo de vehículos de forma más eficiente.
Según el consistorio, este sistema «permitirá reducir el impacto del turismo sobre la movilidad urbana cotidiana» en puntos críticos de afluencia. El nuevo modelo introduce la obligatoriedad de solicitar un permiso diario y, en ciertos espacios, una reserva previa de parada mediante la aplicación SPRO.
¿Cómo funciona Zona Bus 4.0?
Los operadores deberán realizar dos trámites principales:
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Permiso diario (obligatorio): 35 euros por jornada y vehículo.
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Reserva previa en zonas de alta ocupación: 3 euros por operación (subida o bajada de pasajeros).
Las reservas se gestionarán en la web zonabus.cat, donde los operadores deberán crear una cuenta, registrar la matrícula y seleccionar la franja horaria de uso. Los puntos donde será necesaria la reserva previa incluyen lugares emblemáticos como:
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Sagrada Família
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Park Güell
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La Pedrera
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Hospital de Sant Pau
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Les Drassanes
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Ciutat Vella
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Port Olímpic
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MNAC
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Font Màgica de Montjuïc
En total, la Zona Bus 4.0 dispondrá de 210 plazas de uso reservado: 51 para paradas breves y 159 para estacionamiento. También se han habilitado 40 espacios intermodales en zonas periféricas, como Can Dragó o Diagonal Mar, que no requerirán ningún trámite previo.
La Federación del Transporte discrecional, crítica con el modelo
Desde FECAV, la Federación Empresarial Catalana de Autotransporte de Viajeros, se ha manifestado el desacuerdo con el nuevo sistema, alertando de que podría desincentivar el uso del autocar turístico si no se acompaña de medidas adicionales.
En palabras de la Federación, “Barcelona recibe 200 autocares diarios, que transportan a más de 2,8 millones de viajeros al año”, evitando el uso de hasta 20 coches por cada autobús y, por tanto, contribuyendo a la reducción de emisiones de CO₂. Un autocar emite 28,4 gramos de CO₂ por pasajero/km, frente a los 157,5 gramos de un coche privado.
FECAV reclama una revisión de las tasas, mejoras en infraestructuras y facilidades para acceder al centro sin transbordos, cuestionando también qué retornos obtendrá el sector por este aumento de costes. “Hay prioridades más urgentes, como renovar las estaciones de autobuses o mejorar la red de paradas”, indican desde la patronal.
Aplicación SPRO: control en tiempo real
El sistema SPRO, obligatorio para todos los conductores que utilicen la Zona Bus, permitirá:
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Registrar llegada y salida del vehículo.
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Gestionar el cobro automático.
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Monitorizar en tiempo real la disponibilidad de plazas.
Este sistema se apoya en tecnologías inteligentes que permitirán al Ayuntamiento gestionar la ocupación de forma dinámica y eficiente, con el objetivo de compatibilizar el turismo con la movilidad diaria de la ciudad.
Zona Bus 4.0 marca un cambio profundo en el acceso de los autocares turísticos a Barcelona, con un modelo digital que aspira a ordenar el transporte, pero que ha generado inquietud en el sector por sus costes y condiciones de implementación.
