La IRU celebra el enfoque equilibrado del Consejo y pide reforzar en el Parlamento los avances hacia vehículos de mayor capacidad y cero emisiones
Un avance decisivo tras años de negociaciones
Los ministros de Transporte de la Unión Europea han aprobado un enfoque general para la revisión de la Directiva sobre pesos y dimensiones, un paso decisivo para lograr un transporte por carretera más eficiente, sostenible y alineado con los objetivos climáticos. Este acuerdo, fruto del liderazgo de la Presidencia danesa y del esfuerzo conjunto de los Estados miembros, desbloquea años de discusiones complejas.
‘La industria llevaba mucho tiempo esperando la posición del Consejo’
El nuevo planteamiento ofrece un paquete equilibrado de medidas, que incluye la introducción de vehículos de cero emisiones, la mejora de la eficiencia operativa, el refuerzo de los incentivos al transporte intermodal y avances en la armonización normativa en toda la UE. También apunta a una mayor simplificación y digitalización de procedimientos, elementos clave para modernizar el sector.
Raluca Marian, directora de Defensa de la UE en la IRU, valoró positivamente este hito: “La industria llevaba mucho tiempo esperando la posición del Consejo. Por fin podemos avanzar hacia las negociaciones trilógicas”. Añadió además que el objetivo debe ser acordar un marco que impulse tanto los vehículos de cero emisiones como el uso más amplio de vehículos de mayor capacidad.
Prioridad para un marco a prueba de futuro
El acuerdo también envía señales más firmes hacia la armonización de normas logísticas y para el transporte de cargas indivisibles o excepcionales, aspectos esenciales para un desarrollo coherente del transporte internacional. De cara a los próximos diálogos tripartitos, la IRU considera fundamental preservar y fortalecer estos avances, así como mantener incentivos sólidos para los operadores del transporte intermodal.
Las negociaciones con el Parlamento Europeo y la Comisión Europea serán determinantes para establecer un marco regulatorio a prueba de futuro, capaz de apoyar la transición ecológica sin comprometer la competitividad, resiliencia y eficiencia operativa del transporte por carretera en la UE.
La IRU insta a los colegisladores a consolidar y reforzar estos elementos en la fase final de las negociaciones.





