El operador de transporte de la ciudad (DPP), ha realizado un pedido de 14 unidades, que prevé incorporar al servicio en sustitución de buses diésel, que recorrerán una media anual de 60.000 km y que ahorrarán, así, la emisión de 714 millones de toneladas de CO2 a la atmósfera.
Colaboración con Temsa
El vehículo ha sido desarrollado por Skoda de la mano de Temsa. El fabricante turco es responsable de la carrocería y el chasis, mientras que la marca del grupo Volkswagen aporta el equipamiento eléctrico completo, incluyendo las baterías y el pantógrafo. Cuenta con piso bajo completo, capacidad para 69 pasajeros, una autonomía por encima de los 100 km (incluyendo la alimentación de los sistemas de climatización interior) y una capacidad de batería de más de 150 kW, que se recargan por la vía del pantógrafo o por una carga nocturna mediante conector CCS-2.

