El sistema permite a los usuarios delegar la conducción al sistema en determinadas condiciones, como en tráfico denso o en situaciones de congestión en los tramos adecuados de autopista en Alemania a velocidades por debajo de los 60 km/h.
El sistema analiza y tiene en cuenta el perfil de la ruta, los acontecimientos que se producen en ella y las señales de tráfico, reacciona ante situaciones de tráfico inesperadas y las gestiona de forma autónoma (con maniobras evasivas dentro del carril o frenando).
Conjunto de tecnologías
El radar, el LiDAR y las cámaras, así como los sensores de ultrasonidos y de humedad son algunas de las claves de un sistema que Mercedes-Benz pretende también homologar en los estados norteamericanos de California y Nevada a finales de año.
«Mercedes-Benz es el primer fabricante que lleva a la producción en serie un sistema de conducción autónoma de nivel 3 con certificación internacional válida. El manejo responsable de las tecnologías del futuro, como la conducción autónoma condicionada, es la clave de la aceptación entre los clientes y la sociedad», afirma Britta Seeger, miembro del Consejo de Administración de Mercedes Benz Group AG, responsable de Marketing y Ventas.

