Dado que, por tanto, compartirán infraestructura, es necesario que la operación cuente con los más altos niveles de seguridad, precisión y fiabilidad, según explica Sick, proveedor de soluciones basadas en sensores, para presentar su gama de caudalímetros Flowsic, basados en tecnología ultrasónica que permiten medir el caudal de una mezcla de gas natural e hidrógeno.
En numerosos países se están llevando a cabo proyectos de investigación en los que se estudia cuánto hidrógeno podrá transportar la red de gas natural existente sin que los puntos de consumo se vean afectados negativamente. Se están considerando valores muy diferentes para la mezcla de H2 con el gas natural. Dichos valores suelen oscilar entre el 5 y el 30% en volumen, proporción irá en aumento en los próximos años.
El hidrógeno añadido influye en ciertas características del gas natural: densidad, viscosidad, explosividad y velocidad del flujo y del sonido cambian. Esto provoca que los conductos, compresores, juntas, tuberías, válvulas y también la tecnología de medición, por ejemplo, se tengan que enfrentar a desafíos totalmente nuevos en lo que respecta al riesgo de fugas y explosiones o cálculo del poder calorífico. Los caudalímetros están preparados para trabajar con mezclas con contenidos significativos de hidrógeno.
Mediciones estables
Los caudalímetros de gas de Sick permiten trabajar con mezclas de gas natural e hidrógeno sin riesgo, ya que los diferentes elementos que componen los Flowsic (carcasas, circuitos electrónicos, transductores, juntas tóricas, acondicionadores de caudal, tapones o tubos de protección que están en contacto con el gas) han sido diseñados para poder trabajar en presencia de dicha mezcla de gases.
Los caudalímetros actuales son adecuados para medir gas natural con contenidos variables de hidrógeno de hasta el 10% en volumen, aunque Sick sigue investigando con el objeto de aumentar la capacidad de medición hasta proporciones de hidrógeno del 25%.

