Así reza el Informe sobre transporte y medio ambiente 2021, Descarbonización del transporte por carretera: el papel de los vehículos, los combustibles y la demanda de transporte, elaborado por la Agencia Europea del Medio Ambiente. Para explorar los factores que impulsan la evolución de estas emisiones de GEI a lo largo del tiempo, se realizó un análisis para los turismos y los vehículos pesados en los 27 Estados miembros de la UE (UE-27).
Los automóviles y los vehículos pesados (que incluyen autobuses, autocares y camiones) son responsables de la mayor parte de las emisiones del transporte por carretera. Juntos representaban casi el 88% de las emisiones de GEI del transporte por carretera en 2019.
Para explorar las razones que impulsan las tendencias de las emisiones de GEI de las categorías de transporte por carretera que más emiten, se realizaron dos análisis distintos para cada categoría de transporte: uno para las emisiones de dióxido de carbono (CO2), que constituyen aproximadamente el 99% de las emisiones de GEI del transporte por carretera, y el segundo para las emisiones de metano (CH4) y óxido nitroso (N2O). El ámbito del análisis recoge todo el proceso (del tanque a la rueda), contabilizadas en los inventarios de emisiones de GEI.
El enfoque elegido se ajustó a los análisis anteriores de la AEMA (AEMA 2015, 2019a), para permitir la comparativa. El análisis se realizó para el período 2000-2019 en función de dos criterios: los análisis previos que se han mostrado relevantes y la disponibilidad de datos. A diferencia de los análisis anteriores de la AEMA, para investigar el papel de la electrificación en el mercado del automóvil, se distingue ahora entre el consumo de energía eléctrica y no eléctrica de los turismos.
El análisis para las emisiones de los turismos y de los vehículos pesados de más de 3,5 toneladas ha utilizado la misma metodología, con factores de evolución adaptados al transporte de pasajeros y de mercancías, respectivamente.
Identificación de factores
Se consideraron los siguientes seis posibles factores que provocan las tendencias de las emisiones:
- Actividad de transporte de pasajeros/mercancías. Para los coches: el número de pasajeros-kilómetros recorridos por los modos de transporte terrestre de pasajeros, es decir, coches de pasajeros, vehículos de dos ruedas, autobuses y autocares, ferrocarriles, tranvías y metros. Para los vehículos pesados: el número de toneladas-kilómetro transportadas por las vías navegables interiores, el ferrocarril y el transporte por carretera.
- Cuota modal. La proporción de pasajeros-kilómetros recorridos en coche en el conjunto de la actividad de transporte de pasajeros/el porcentaje de toneladas-kilómetro transportadas por los vehículos pesados en la actividad global de transporte de mercancías.
- Eficiencia energética. La energía consumida por pasajero-kilómetro de los turismos/energía consumida por tonelada-kilómetro de los vehículos pesados. Esto incluye el consumo de combustibles fósiles, biocombustibles y electricidad.
- Efecto de la electrificación. Afrontado como la proporción de energía no eléctrica (combustibles) en el consumo de energía de los turismos. Este factor no se utiliza para el análisis de los vehículos pesados.
- Efecto de los biocombustibles. Se mide utilizando la proporción de combustibles fósiles en consumo de energía no eléctrica de los turismos/vehículos pesados. A los biocombustibles se les atribuye un factor de emisión de CO2 de cero en la contabilidad climática.
- Intensidad de carbono de los combustibles fósiles. Definida como las emisiones de CO2 por unidad de combustible fósil consumido (por los coches/vehículos pesados). Este factor de intensidad de carbono es una media ponderada de los factores de emisión de CO2 de los combustibles fósiles incluidos en el inventario de emisiones de GEI.
El primer factor puede ser influenciado por estrategias de «evitar«, el segundo factor por estrategias de «cambio» y los factores tres a seis por estrategias de «mejora«.
Para el análisis de descomposición de las emisiones de metano (CH4) y óxido nitroso (N2O), no se considera ningún factor para el efecto de los biocombustibles. El análisis de las emisiones de CH4 y N2O consideró sus valores ponderados por su potencial de calentamiento global.

