Aprovechando la actualidad marcada por la Ley de Movilidad Sostenible, que acaba de llegar al Congreso para su tramitación a lo largo del año que está a punto de comenzar, es conveniente recordar que la Comisión recomienda adoptar las siguientes medidas para mitigar algunas ineficiencias asociadas al sistema concesional, dado que la conclusión general del informe apunta hacia una posible liberalización de determinados tráficos en nuestro país, que ahora se cubren mediante concesión estatal.
En primer lugar, se habla de la necesidad de reforzar las obligaciones de transparencia de los concesionarios. Para garantizar el correcto funcionamiento del sistema concesional, es necesario que las Administraciones Públicas (AA.PP) cuenten con información suficiente para diseñar y regular los servicios licitados y que estén en posición de comprobar el cumplimiento de las obligaciones de los concesionarios.
Las AA.PP. deben exigir una mayor transparencia a los operadores, recabando toda la información que pueda ser relevante para el diseño de los servicios o la convocatoria de los concursos, incluyendo la información relativa a los costes de prestación del servicio, y la demanda y oferta del servicio con un nivel suficiente de desagregación espacial (por paradas) y temporal (mensual, diaria u horaria).
A su vez, esto implica que las AA.PP. deben dotarse de los medios suficientes para procesar la información recibida de los concesionarios, estandarizarla y tratarla de forma que sea utilizable para informar los procesos de planificación. En este sentido, las nuevas tecnologías permiten identificar y geolocalizar en tiempo real los autobuses y conocer la demanda en tiempo real de los servicios gracias a la implementación de sistemas integrados de billetaje y pago, lo que contribuye tanto a enriquecer la información disponible para las AA.PP. como a reducir los costes de inspección del cumplimiento del contrato.
Acceso libre y transparente a los datos de operación
La operación del servicio por el concesionario en régimen de monopolio le confiere una ventaja informacional respecto al resto de licitadores. Las AA.PP. deberían reforzar la transparencia del sistema concesional, haciendo públicos regularmente los datos relevantes para la prestación del servicio de una forma abierta, accesible y transparente. Estos datos deberían contar con un nivel de detalle muy superior al contemplado en los pliegos actuales, equiparando la información disponible entre los concesionarios y el resto de licitadores. A este respecto, se debería considerar incluir información sobre la demanda y costes de explotación por mes, día o incluso hora, y desagregados por ruta o por paradas de origen y destino.
Estos datos deberían estar a disposición de los operadores de forma permanente, para facilitar que planifiquen con suficiente antelación las ofertas de licitación, y actualizarse con frecuencia, de forma que los operadores de los segmentos liberalizados del mercado puedan adaptar sus servicios a la red de transporte público, complementándola.
Representación equilibrada de los agentes involucrados
Este es uno de los puntos que podría generar mayor controversia, dado que la CNMC recomienda replantear la participación de las asociaciones de operadores en órganos de decisión públicos como el Comité Nacional del Transporte por Carretera (CNTC), el Consejo de Administración del Consorcio Regional de Transportes de Madrid (CRTM) o el Comité Madrileño de Transporte por Carretera (CMTC). Esta representación fomenta la coordinación entre competidores y aumenta el riesgo de captura del regulador, por lo que se debe reevaluar su existencia y funciones, que deben tener estar justificadas por motivos de interés general.
La CNMC considera que la participación de las asociaciones de operadores en órganos de decisión públicos no debería, en ningún caso, suponer una cesión de las funciones administrativas encomendadas al regulador. Allí donde su participación se considere imprescindible, se recomienda que los estatutos de estos órganos equilibren el peso de las asociaciones más representativas con las minoritarias, a fin de asegurar una interlocución adecuada entre estas últimas y las AA.PP.
La rotación en la composición o el nombramiento de representantes también contribuiría a equilibrar el peso de todos los operadores en estos órganos. Por último, la CNMC considera que las asociaciones de usuarios deberían tener un peso equivalente al de los operadores en estas instituciones, para asegurar una correcta ponderación de los intereses de unos y otros.

