El asunto es que, por más vueltas que se le dé, por más veces que se identifique o por el mero hecho de que sea una cuestión internacional, dicha falta de mano de obra no va a desaparecer.
Por eso, cuando alguien aporta una solución concreta e inmediata, es de agradecer. Más allá de si, a la largo, tiene mayor o menor impacto.
Es el caso de la Comunidad de Madrid, que hace unos días anunció su intención de activar un Plan de ayudas económicas para la obtención de los permisos de camión (C ó C+E) y autobús (D). El Plan prevé una dotación económica de dos millones de euros, repartidos en bonos de 600 euros para que personas sin empleo, o bien trabajadores que estén empleados en algún centro de trabajo radicado en la Comunidad de Madrid, siempre que sean poseedores del permiso de clase B (coche) y que cumplan con los requisitos de edad mínimos para cada uno de los permisos que se subvencionan, puedan recibir esta ayuda para progresar en su formación.
Se calcula desde el gobierno regional madrileño que, en el plazo de dos años, la cifra de beneficiarios podría rondar los 2.800, según fuentes del Sector.
¿A qué da derecho?
Con el bono será posible facilitar el pago tanto de la matrícula del curso y el material didáctico, como de la formación teórica, que versará especialmente sobre conducción sostenible y dispositivos tecnológicos. A esto se suman 10 clases prácticas de maniobras y/o circulación, pudiendo realizarse el curso en modalidad de teleformación a través de la Escuela del Transporte, apuntan desde Fenadismer.
Así que, con tener el permiso de conducir B y residir en la Comunidad de Madrid, casi es suficiente para optar a estas ayudas, efectivas y de calado, porque llegarán a un importante número de profesionales. Veremos, como decíamos, si el efecto es el deseado, pero el mero paso al frente ya merece ser digno de aplauso.

