La tasa de éxito en el primer intento se refiere al porcentaje de paquetes que se entregan con éxito a la primera, en comparación con el número total de paquetes enviados en un periodo determinado.
El éxito de los primeros intentos de entrega es un factor clave para mantener la satisfacción del cliente y los beneficios. Las entregas completadas en el primer intento no sólo proporcionan una experiencia positiva para los clientes, sino que también ayudan a evitar los costes adicionales que supone acometer la ejecución de múltiples entregas para el mismo pedido.
Según Fleetroot, un proveedor de software de entregas, el coste de una segunda entrega equivale a entregar tres paquetes. Para los minoristas, el fracaso del primer intento supone un retraso en la entrega final para los clientes, lo que pone en peligro la satisfacción del cliente, más tiempo dedicado a gestionar el diálogo con los clientes, más kilómetros recorridos, más dinero gastado en combustible y, por tanto, una reducción de los márgenes de beneficio.
Dos de los factores del fracaso en la entrega son:
– Calidad y precisión inadecuadas de la información sobre la dirección de entrega de que dispone el conductor (geolocalización, accesibilidad).
– La dificultad de gestionar un sistema que permita el diálogo entre el expedidor y el cliente.
Comparativa por países
Parcel Monitor ha facilitado a Ti Insight datos sobre los porcentajes de éxito en el primer intento en Austria, Australia, Bélgica, Alemania, Dinamarca, España, Finlandia, Francia, Reino Unido, Italia, Países Bajos, Noruega, Suecia y Estados Unidos.
Casi todos los países analizados registraron tasas de éxito en el primer intento iguales o superiores al 90% en el cuarto trimestre de 2022, con los Países Bajos y Finlandia presumiendo de tasas de éxito en el primer intento superiores al 99%.
Teniendo en cuenta la feroz competencia en los servicios de última milla, los proveedores de paquetería como DHL se han asociado con proveedores de software de localización precisa como what3words para garantizar el éxito del primer intento de entrega y la fidelidad del cliente, así como un mayor uso de los puntos de recogida.

