Divididas entre quienes apuestan por varias asociaciones (multi-sourcing) y las que prefieren concentrarse en unas pocas relaciones fuertes y fiables (aprovisionamiento doble o único), las empresas buscan formas de hacer frente a la escasez de materiales y piezas.

Al hacerlo, es necesario adaptar los procesos de aprovisionamiento y encontrar el equilibrio adecuado para minimizar los riesgos en la cartera de proveedores.
En varias industrias, la doble contratación o cruzada se están debatiendo para aumentar la resiliencia de las cadenas de valor. En este dual sourcing, se incorpora un proveedor adicional, mientras que en el aprovisionamiento cruzado el producto se solicita a un proveedor ya existente en caso de producirse un cuello de botella.
Una proporción 80-20%
En el marco de las estrategias de doble aprovisionamiento, el volumen necesario de piezas se divide entre los proveedores, con un 80% de las piezas procedentes a menudo del proveedor principal y el 20% de un proveedor secundario.
Diversificar geográficamente puede ser también una solución ante posibles riesgos provocados por agentes externos, como las inundaciones, las erupciones volcánicas o la inestabilidad política, de manera que se selecciona a proveedores de dos regiones independientes.
A menudo, las piezas más rentables se obtienen de un proveedor global principal, mientras que el proveedor regional ofrece flexibilidad en caso de necesidad. Un aumento de la demanda regional del volumen de piezas es, por tanto, sólo en una pequeña medida.
Proceso de selección
La búsqueda de un proveedor potencial puede resultar muy difícil en muchos aspectos. Las soluciones digitales de matchmaking pueden facilitar este proceso. Además, la selección de otro proveedor suele estar sujeta a largos procesos de calidad y certificación. El cambio se simplifica considerablemente si ya se dispone de los certificados adecuados.
Algunos proyectos de investigación de la Unión Europea apoyan este hecho y muestran enfoques para simplificar el proceso de certificación.
Una rápida colaboración entre proveedores también está limitada por las especificaciones técnicas de los sistemas. A menudo, los distintos sistemas informáticos de un producto están finamente ajustados y acoplados entre sí. Esta circunstancia hace que la integración y la rápida adaptación de los proveedores sea más ágil.
Con la subcontratación cruzada, la integración del proveedor es mucho más sencilla, ya que las piezas suministradas proceden de un proveedor ya existente. Esto significa que ya se pueden utilizar interfaces técnicas y los requisitos previos para las inspecciones de calidad ya están definidos o superados. A través de este modelo de cross-sourcing, la base de proveedores sigue siendo la misma, lo que aumenta la flexibilidad, pero la complejidad de la cadena de suministro y los procesos de coordinación con los proveedores siguen siendo las mismas.

