Tengo entendido que, debido a la apretada agenda de las próximas semanas, el TRAN ha decidido posponer sus informes sobre el nuevo Paquete de Movilidad de los Pasajeros hasta la próxima legislatura. Aunque me hubiera gustado ver todavía algún progreso en este mandato, entiendo perfectamente sus razones para hacerlo y aprecio que estén preparando el terreno para cuando se reanuden los asuntos parlamentarios después de las elecciones.
La Presidencia belga iniciará los debates con vistas a presentar un informe de situación en junio. Los derechos de los pasajeros son muy valorados por nuestros ciudadanos, y deberíamos avanzar rápidamente en este ámbito.
Las bicicletas y los cielos
Tengo más buenas noticias sobre la Declaración ciclista de la UE, que ya se está debatiendo en el Consejo. También acojo con satisfacción el compromiso del Parlamento y su pleno apoyo a la propuesta de la OCM. Estoy deseando firmar la Declaración durante las Jornadas Conectar Europa en abril.
La última propuesta que quiero mencionar hoy no es nueva, pero no por ello es menos importante. La propuesta de la Comisión para reformar el Cielo Único Europeo, SES2+, sigue en trílogo, a pesar de los intensos debates desde el verano de 2021. Me gustaría dar las gracias al Parlamento y, en particular, a su ponente, Jean Marian Marinescu, por su constante apoyo y tenacidad, y por su enfoque tan constructivo durante las negociaciones.
A pesar de las declaraciones favorables del último Consejo de Transportes, los avances han seguido siendo decepcionantes, y algunos Estados miembros siguen resistiéndose a un mandato de negociación de la Presidencia.
No obstante, sigo teniendo esperanzas en este importante expediente y me complace que la Presidencia belga haya presentado un plan para concluir las negociaciones antes del final de la actual legislatura. El calendario es extremadamente ambicioso, pero con la voluntad adecuada, podemos conseguirlo. Y sé que hay un fuerte impulso en esta casa.
Así pues, demos un último empujón para lograr un resultado positivo. El tiempo corre. No tenemos tiempo que perder para conseguir que el transporte y la movilidad sean más sostenibles, más inteligentes, más seguros, más accesibles y más resistentes.

