Mientras abordamos la actual crisis energética, no podemos olvidar nuestros planes a más largo plazo. Por ello, acojo con gran satisfacción el debate de hoy sobre el paquete de descarbonización de los mercados del hidrógeno y del gas. El aumento del hidrógeno verde y del biometano nos ayudará a eliminar el gas fósil ruso de forma completa y definitiva. El debate de hoy me hace confiar en que el Consejo pueda acordar su posición antes de diciembre.
Hemos dado un paso más hacia un futuro más eficiente desde el punto de vista energético con el acuerdo político alcanzado por el Consejo sobre la Directiva de Eficiencia Energética de los Edificios. Los edificios consumen el 53% del gas en la UE, lo que los convierte en un sector clave para la descarbonización y la seguridad energética, además de reducir la factura energética. El acuerdo de hoy es menos ambicioso que la propuesta original de la Comisión, pero es un paso adelante y una base para entablar las negociaciones con el Parlamento lo antes posible, para dar la certeza necesaria a las personas y empresas implicadas.
Solidaridad común
Por último, el Consejo de hoy me ha dado la oportunidad de informar a los ministros sobre la crítica situación energética de dos países de nuestra familia europea.
En Ucrania, los recientes bombardeos de Rusia han tenido como objetivo las infraestructuras energéticas y han causado graves daños. El 30% de los equipos ucranianos, como transformadores, disyuntores y líneas eléctricas, han sido destruidos, provocando cortes masivos.
Es urgente que la UE intensifique su apoyo para sustituir rápidamente las infraestructuras dañadas. Lo que está en juego es la protección y el bienestar de decenas de miles de hogares, personas vulnerables, niños y ancianos este próximo invierno. He escrito a todos los ministros y les he pedido su apoyo urgente en este sentido.
Como recuerdan, hemos creado hace meses un fondo en la Secretaría de la Comunidad de la Energía, dedicado a reparar infraestructuras energéticas específicas en Ucrania. Ya hemos recaudado 20,5 millones de euros en donaciones, pero es evidente que necesitamos más. He recordado que los Estados miembros tienen otra opción para ayudar a la reparación y reconstrucción energética de Ucrania. Se trata de donar equipos energéticos a través del Centro de Coordinación de la Respuesta de Emergencia de la Comisión. Este mecanismo ya ha facilitado más de 60 donaciones relacionadas con la energía.
Las empresas privadas también han sido generosas y han entregado suministros por valor de más de 10 millones de euros. Les animamos a hacer aún más y podemos ayudar a transportar los equipos donados a Ucrania. Además de los equipos energéticos, necesitamos seguir suministrando gasolina y gasóleo.
En Moldavia, la situación también es cada vez más difícil. Moldavia depende de Ucrania para el 30% de sus importaciones de electricidad. La suspensión forzosa de las exportaciones de electricidad desde Ucrania supone un gran problema para Moldavia.
La semana pasada, Moldavia también fue informada de que los flujos de gas procedentes de Gazprom se reducirán aún más, así como el suministro de electricidad desde Transnistria. Este es otro claro ejemplo de que Rusia está armando los suministros de energía. Moldavia ha conseguido algunos suministros alternativos de Rumanía durante un periodo limitado, pero no es suficiente.
Estamos trabajando con la Comunidad de la Energía para garantizar que Moldavia pueda importar gas y electricidad de fuentes alternativas a Transnistria. Pero el reto no es sólo el acceso al suministro, sino también la financiación.
Estamos estudiando la forma de aumentar el apoyo de la UE. Al final, este Consejo ha tratado de la solidaridad y de una respuesta unida a la crisis. Me alegro de que los debates de hoy, y las decisiones adoptadas sobre la Directiva sobre la energía renovable, demuestren que seguimos unidos tanto en el impulso de nuestro programa del Pacto Verde como en la elaboración de soluciones eficaces a la crisis energética, tanto para los Estados miembros de la UE como para nuestros vecinos.
